Si bien «Bad Ass» Billy Gunn tuvo su última etapa seria como luchador en Impact Wrestling, WWE le dio una oportunidad más como entrenador de NXT, además de aparecer apariciones esporádicas en luchas de «nostalgia» al lado de Road Dogg. Pero en 2015 fue despedido debido a que descubrieron que usó esteroides en competencias de fisicoconstructivismo fuera de WWE.
Se pensaba que ya no volvería nunca a WWE, pero ahora fue llamado porque será parte de la generación 2019 del Salón de la Fama. Sin embargo, será algo temporal, pues se espera que después de eso se integre de lleno a AEW, donde tendrá un papel parecido al que en WWE tienen los llamados «productores».
En una entrevista con WrestlingInc, Gunn explicó lo que será su trabajo en la nueva empresa.
«Para ser honesto, no lo sé. Estaban iniciando la empresa y estaban buscando, supongo. Me llaman ‘head coach; no utilizamos el término ‘productor’. Mi trabajo será ayudar a los luchadores más jóvenes a medida que avanzamos y lo espero con ansias. Eso va a ser impresionante.
«Todavía sigo luchando en shows independientes y seguiré haciéndolo, y eso es bueno. Tenemos muchos talentos nuevos y más jóvenes que necesitan desarrollarse y los ayudaré a encontrar su camino. No voy a tomar el control del talento. Sólo los ayudaré a desarrollar lo que tienen.
«Algunas veces solo necesitan dirección. Vamos a estar haciendo televisión eventualmente y muchos de estos chicos no tienen la experiencia que yo tengo con la televisión, y les ayudaré con eso. Soy, literalmente, un milusos. Los ayudaré con todo aquello en lo que necesiten ayuda».
«Estamos trayendo talentos de los que muchas personas nunca han oído hablar, o que han escuchado de ellos, pero no los han visto. Ahora les daremos una plataforma para que sean vistos y crezcan lo más que puedan».
Coqui ja
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