Sin haber acordado una fecha para su regreso, ni tampoco un oponente ni evento para su siguiente combate, todo indica que Bill Goldberg no está retirado, solo tomándose un nuevo descanso. Él mismo adelantó recientemente que lo más probable es que vuelva a luchar más adelante. Aunque quiso aclarar que nadie lo sabrá hasta que ocurra. Desde SÚPER LUCHAS adelantamos, a modo de especulación, no sin sentido, que retornará para WrestleMania 36. Porque nadie quiere perderse el mayor show de todos.
► Bill Goldberg vende su mansión
Todavía no hemos tenido más novedades, lo cual concuerda con lo que él mismo comentó, no al menos acerca de su futuro en la lucha libre. No obstante, sí acerca de su vida privada. SF Gate informa que el miembro del Salón de la Fama de WWE ha puesto en venta la lujosa mansión que posee en Eagle Mountain Estates, Carolina del Sur. La misma fue construida en 1997, comprándola Goldberg dos años después por $1 millón. Ahora «cualquiera» puede adquirirla por la cantidad de $3,2 millones.
Además de las imágenes que vemos a continuación, podemos adelantar que esta enorme casa tiene cuatro dormitorios y cuatro cuartos de baño. Si miramos fuera veremos un camino privado completamente cerrado, un garaje para vehículos personalizado, un establo para caballos, a lo que hay que sumar 24 kilómetros de sendero para pasear con ellos, media cancha de baloncesto, un pozo de fuego, un estanque koi y un pequeño arroyo. Sin olvidar que cuenta con una casa para invitados.
[vimeo 365585001 w=640 h=360]
No ha salido a la luz el motivo por el que el veterano luchador ha decidido poner a la venta esta mansión, pero no creemos que sea porque tenga algún tipo de problema o las cosas no le estén yendo bien. Ahora veremos si alguien se muestra interesado en adquirir esta lujosa casa propiedad durante veinte años de uno de los más grandes nombres de la historia de la lucha libre.
Goldberg, en la época de mayor auge para el Wrestling en Estados Unidos, fue el segundo mejor pagado en WCW, sólo detrás de Hulk Hogan. Un luchador que subió como la espuma pocos años después de su debut, un ícono, la cara de la empresa, y fenómeno, que tal vez jamás se vuelva a repetir dada a la decreciente popularidad del wrestling después del 2001.