La carrera de Alí en los encordados no comenzó en el Cruiserweight Classic de WWE, pero ese torneo lo puso en el radar de la lucha mundial, pues él no había luchado para empresas importantes en el pasado. Como el mismo lo dijo el año pasado, «Casi todos los demás en el elenco eran bien conocidos. Ya habían luchado en algunas de las compañías independientes más grandes del mundo. Yo no tenía eso; no había tenido una etapa, por ejemplo, con Ring of Honor, ni había participado en una Battle of Los Angeles de PWG. Yo era un tipo que luchaba sólo en la escena independiente del área de Chicago, y era así porque no me quedaba de otra, pues mi familia dependía de mis ingresos, así que mi trabajo ‘real’, como policía, tenía prioridad».
Así que Alí no se queja. Toda su carrera en WWE es una buena experiencia, «una fiesta continua». De esa forma la describió cuando recientemente habló con Wild Bill at WIN 98.5 acerca de cómo es ser una Superestrella.
«Cuando estás viajando de una arena a otra, te relajas, recuperas el aliento, bebes un poco de agua, tal vez tomas una buena comida, y luego te diriges a la siguiente ciudad con tus amigos de viaje. Y durante el camino vives todo tipo de historias, así que es una fiesta sin parar para nosotros… Estamos viajando todo el tiempo, así que siempre tenemos que hacer ajustes basados en lo que implica el día».
El ex 205 Live también comentó sobre su participación en WrestleMania 28, donde luchó por el Campeonato Crucero contra Cedric Alexander.
«Es uno de los mejores recuerdos que tengo. Luchando en WrestleMania contra uno de mis mejores amigos como es Cedric Alexander por el Campeonato Crucero. Creo que nunca estaré tan nervioso como esa noche«.
Le queda toda una vida por delante para demostrar lo que vale y para seguir triunfando en WWE. Cabe mencionarse que nunca ha sido campeón, tampoco en la división crucero. Seguramente lo sea en un futuro, pero en este momento no tiene ninguna rivalidad.
Ali tiene un gran futuro, pero lo deben llevar con calma para que no termine quemado