En la entrega anterior hablamos de lo duró que fue llegar a la Ciudad de México, y que generaciones enteras de luchadoras se perdieron la gloria de pisar la Catedral de Lucha Libre Mexicana y las demás arenas, que en ese entonces no eran pocas. También se habló de como las gladiadoras alzaron la mano en más de una ocasión, con su trabajo, para darse a notar. La presión que medios y promotores hicieron en el gobierno local para que se quitara una prohibición muy sórdida.
La veda terminó y la lucha femenil comenzó a formar parte de carteles de lucha libre, por un tiempo fue la moda, pues el trabajo de las mujeres daba para eso y más, en la Arena México se dieron cabida grandes duelos de apuesta, como el de la impresionante Pantera Sureña, cobrando la cabellera de la experimentada Chela Salazar apenas unos meses después del reinicio de la lucha libre en la capital, el 27 de junio de 1987. También se dieron los primeros encuentros donde las identidades estaban en juego, en agosto de ese mismo año en la misma Catedral, el 16, Selene cobraba la máscara de la Guerrillera, hoy mejor conocida como Tania. Sin embargo, la propia Selene era destapada unos meses después en la hoy extinta Pista Revolución ante la rudaza y gran amiga de Tania, La Diabólica del Caribe.
Irma Aguilar se volvería en el símbolo que la Empresa y la televisión necesitaban para que la lucha femenil llamara la atención, lo cual causó polémica y muchas rivalidades, la famosa ricitos de oro hizo valer su lugar y en un periodo menor a dos años cobró 4 cabelleras (Rossy Moreno, Katty Mendoza, Martha Villalobos y Lola González). También tuvo el honor de ser la primera Campeona Femenil del Distrito Federal, al vencer en la final del torneo del 30 de enero de 1987, a la mismísima Villalobos.
La Aplanadora, Martha Villalobos, logró como ruda, ganarse el corazón del público por su enorme carisma y las cosas que podía y sabía hacer con su peso. Con Irma Aguilar perdió el invicto en cuestión de luchas de apuestas, sin embargo, cuando los años noventa llegaron, Villalobos volvió a ser una gran rufiana ganando la máscara de La Briosa y la cabellera de ella misma, además de la Rossy Moreno.
Rossy Moreno merece una historia aparte, con casi cuarenta años de profesional, la llamada Fierecilla, ha ganado campeonatos y cabelleras por todo el país, volviéndose en una verdadera maestra de los cuadriláteros. Experta en el arte de hacer enojar, con sus rudezas, al respetable, pero también dominadora de los secretos a ras de lona hacen de ella alguien digna de admirar.
Eterna campeona es la forma más genérica de definir a Lola González, quien ha logrado ser estelarista en varios países, y enfrentado a la crema y nata de las mujeres tanto en Japón, Estados Unidos, Canadá y pisando otros países de varios continentes. Rivalidades: mil y una. Pasión, entrega, valor, coraje, todo lo tiene Lola la Grande, quien desde antes que la lucha fuera permitida en la Ciudad ya había sido coronada Campeona del Mundo, defendiendo su título ante amazonas de todos lados, lo mismo ante doña Irma González, que ante Jaguar Yokota, desde Pantera Sureña hasta Harley Saito. Así que cuando la lucha se abrió para ellas, ella llevó la mano en alto mil y una veces, quien no la recuerda enfrentando a la extrañada La Monster o aquellos encontronazos contra Bull Nakano a principios de los noventas.
Lilia Rangel, mejor conocida como Pantera Sureña, quizá sea la mejor luchadora mexicana de todos los tiempos, y la que mejor dominó la escuela ruda y la escuela técnica. Mil anécdotas se cuentan de esta gladiadora alumna de Cuahutémoc “Diablo” Velasco, desde que era usada como “caladora” oficial de cualquiera que pretendía ingresar al entrenamiento del Diablo, o sus intensas giras por Japón donde se coronó Campeona Mundial WWWA el 7 de mayo de 1983, sus incursiones a la WWF de manos de la grandiosa Monster. Sus varios personajes enmascarados. En fin, Pantera Sureña escribió con letras de oro su andar en la lucha libre mexicana y tiene un lugar ganado en el Olimpo luchístico.
Antonio Peña siempre tuvo mucha fe en el trabajo de las mujeres, tanto en su estancia como programador en el CMLL, como después en AAA, donde incluso les organizó un evento especial para ellas, el Reina de Reinas y que a la postre se volvería en el Campeonato Femenil de esa empresa. Siempre Antonio dio espacio para las gladiadoras, apoyando que surgieran facciones (Las Rockers, las Nasty Girls, etc.), algo que si bien no era nuevo, pues Las Monjas Asesinas ya habían hecho historia a principios de los ochenta en El Toreo, si sirvió para generar y les dio continuidad a sus rivalidades, así, magnas funciones se dieron con varias luchas femeniles en lugares importantes de la cartelera, como aquel cartel del 12 de noviembre de 1993, cuando hubo dos luchas de apuestas femeniles en la misma velada, primero Lola defendía el Campeonato Mundial Femenil WWA ante La Monster y Neftaly junto a La Briosa rapaban a Pantera Sureña y Wendy.
Sin embargo, sólo Peña seguía apoyando la lucha libre femenil, después de mediados de los noventas, las luchas femeniles en el CMLL fueron desapareciendo, hasta que prácticamente no hubo ninguna en el coso de la Doctores. Desde 1996, cuando Lady Apache ganó el Campeonato Mundial Femenil CMLL a Chaparrita Asari, el título no se volvió a defender en la Catedral en mucho tiempo. La propia Lady tuvo que emigrar a AAA por la falta de actividad, y el título fue obtenido por La Diabólica, quien también no tuvo demasiado trabajo y después de refugiarse en el circuito de Raúl Reyes, emigró a AAA en 2003, dejando atrás el cinturón de la empresa, cosa que al CMLL no le importó mucho, pues el cinturón quedó inactivo por los dos siguientes años.
Fue hasta que SÚPER LUCHAS y algunos empresarios independientes volvieron a poner su atención en la lucha femenil, y en especial lo que pasaba en Lucha Libre Femenil, la pequeña empresa de Monterrey que le dio su lugar a las mujeres en el cuadrilátero, de entre todas destacaba el carisma de la famosa Sarah Stock, Dark Angel, quién fue portada de SÚPER LUCHAS en muchas ediciones despertando la atención de propios y extraños, mucho antes de que pisara la Ciudad de México. Así, el CMLL no tuvo de otra que volver a abrir las puertas de la majestuosa Arena México a las mujeres, que con una veterana como lo es Lady Apache y dos jóvenes fogueadas en la zona metropolitana (Marcela y Amapola) tuvieron, junto a Dark Angel, el honor de volver a presentar un encuentro femenil el 1° de julio de 2005. La euforia que trajo la darkangelmania siguió pero poco a poco se fue diluyendo, y aunque el CMLL no ha dejado de presentar encuentros femeniles, lo cierto es que los ha tomado como de mero relleno en sus funciones.
Aunque se mencionó que AAA sí ha defendido la lucha femenil, debemos de ser honestos y decir que tras la muerte de Antonio Peña esto cambió drásticamente. Su torneo se convirtió en un Campeonato regular y que la actual titular, Taya, prácticamente lo ha defendido en un par de ocasiones en poco más de dos años con la faja. Triple A dejó de apoyar la lucha femenil, y si mujeres aparecen en sus funciones, en el mejor de los casos son como parte de relevos de locura, o en relevos sencillos. Muchos podrán decir en contra que se acaba de presentar el Mundial de Lucha Libre, donde la tercia nacional pudo vencer a muchas buenas gladiadoras del resto del mundo. Sin embargo seamos sinceros, antes a esto ¿Cuándo había sido la última vez que Mary Apache había salido en un programa televisado? Traer de vuelta a Lady Apache sólo significó que durante todos estos años no han podido crear una luchadora del calibre que la señorona de la lucha libre tiene.
Así, queda la reflexión, éste año se cumplen treinta años de que la lucha libre femenil volvió al corazón de nuestro país, sin embargo ante la cerrazón de las empresas, y ante la crisis que la lucha libre nacional vive uno debe de pensar: ¿hay algo que celebrar?
Al parecer sí. Doña Lola González tomó la iniciativa y apoyándose de ilusiones comenzó a unir esfuerzos y a sumar voluntades. Esther Moreno, quien tantas glorias y buenos recuerdos nos diera en los ochentas y los noventas tanto en nuestro país como en Japón, alzó la mano y puso a disposición de la idea, del sueño, otro sueño, uno que le ha costado a toda su familia mantener en activo, la pintoresca y funcional Arena Azteca Budokan para hacer el festejo. Tania también alzó la mano y se unió a la fiesta homenaje, aportando voluntades, sumando leyendas, sumando luchadoras actuales, sumando nuevas promesas y haciendo un cartel digno.
El día que se hizo la presentación del evento, las organizadoras e invitadas lucían emocionadas ante el reto, doña Lola comparó su idea, la ilusión de esta función con la FMW de Onita, donde el luchador extremo declaraba honestamente ante los aficionados: “No tenemos nada, no tenemos dinero, no tenemos recursos… pero los tenemos a ustedes.”
Es Lola la que se inquiere y se contesta:
“¿Qué que esperamos? Esperamos un milagro. Esperamos poder llenar la arena con mucho corazón.”
Esther dio a conocer el cartel, el cual tendrá carácter internacional pues en el turno semifinal la propia Esther hará equipo con la chilena Stephania Vaquer y Lady Apache para enfrentar a la querida japonesa Mima Shimoda, La Hechicera y Miss Janeth. En otra buena lucha se verán las caras La Briosa, La Venus y La Chola contra Migala, Linda Star y Crazy Star. Previo a este encuentro, la familia Moreno premiarán a la nueva generación de luchadoras con el Campeonato Arena Budokan-Dinastía Moreno, el cual será para la ganadora entre ocho dignas herederas de la lucha femenil: Black Fury, Sexy Pólvora, La Jarochita, La Hielera, Dulce King, La Magnífica, Muñeca de Plata y la carismática Big Mama. Pues el turno estelar corresponde a las leyendas Lola González, La Sirenita y Cinthia Moreno enfrentándose a Rossy Moreno, Tania y La Diabólica.
Además se confirmó la aparición de las también leyendas: Irma González, Irma Aguilar, Martha Villalobos, Pantera Sureña, Selene, Alda Moreno, Wendy, Vicky Carranza, Reina Gallegos, La Marquesa, India Sioux Sra., Princesita Dorada y nuestra primera Campeona Mundial, Estela Molina.
El cartel luce redondo e interesante por la cantidad de personalidades que están involucradas. Sin embargo, tanto Cinthia Moreno como Tania expresaron que el evento no sólo es de ellas y que les hubiera gustado que gente como Tiffany, Amapola, Marcela, Fabi y Mary Apache estuvieran presentes, que bien saben que no es culpa de ellas, sino de las empresas que las bloquean para actuar en la escena independiente, pero saben que el festejo también las incluye.
La pregunta lucía obvia, pero nadie lo decía: Pero ¿por qué si se celebra la apertura de la lucha femenil en la Ciudad de México, el evento se realizaría en Ciudad Nezahualcóyotl? Cuando al fin surgió el comentario, fue Lola la que atajó y con el orgullo y el pundonor que la caracteriza nos dijo:
“El Consejo no lo iba a hacer, y aunque ellos nos apoyaron y con ellos nos hicimos muchas de nosotras, no lo iba a hacer. AAA no lo iba a hacer. Así que un día le dije a Esther por teléfono: ¡Bueno! ¿Qué no tenemos los suficientes ovarios nosotras para hacerlo nosotras mismas? Esther dijo que sí y ofreció la Arena y a buscar patrocinadores, y luego se han ido sumando muchas voluntades. Aunque sí quiero decir: ¡AQUÍ ESTAMOS CONSEJO!, ¡AQUÍ ESTAMOS AAA!»
Tania redondeó la respuesta al referirse que, aunque se han avanzado en muchas cosas, aún hay machismo en el medio luchístico, y una especie de patriarcado que trata de subajar la actuación de las mujeres. Sin embargo, ellas solitas se valen para sacar adelante este y otros retos.
¿Buscar apoyo en las autoridades o en los legisladores? Lola una vez más comenta:
“Ya nos cansamos de tocar puertas que no se abren.”
¿Será la única función para conmemorar las tres décadas? Se espera que no, que está función sea sólo el principio de una serie de eventos que detonen no sólo en un festejo por un logro, sino que sirva para mejorar las condiciones que las luchadoras tienen ante promotores y empresas. Después de todo, es innegable la sentencia de Lola: Aquí están las luchadoras, Consejo y AAA no se olviden de su historia.